El cuadro clínico comienza de forma repentina, con síntomas como congestión nasal, estornudos, dolor de garganta, malestar general, fiebre, tos y expectoración, y la duración del proceso es de aproximadamente una semana.
Por Mario Paredes. 20 junio, 2022. Publicado en El Tiempo, el 19 de junio de 2022.Las infecciones de las vías respiratorias (IVR) son enfermedades que se producen en el aparato respiratorio y que son causadas por microrganismos como los virus y las bacterias. El cuadro clínico comienza de forma repentina, con síntomas como congestión nasal, estornudos, dolor de garganta, malestar general, fiebre, tos y expectoración, y la duración del proceso es de aproximadamente una semana.
La forma de contagio es principalmente por vía aérea. La transmisión se produce a través de las gotitas infecciosas provenientes de la tos y los estornudos que elimina la persona enferma al medio ambiente, que la persona sana puede inhalarlas al momento de respirar.
La mejor manera de ayudar a prevenir la transmisión de los microbios causantes de las IVR es evitar el contacto con gotitas o secreciones de saliva o moco. Para ello, se sugiere tomar Las medidas siguientes:
– Minimizar el contacto con personas enfermas de IVR.
– Que la persona enferma se cubra la boca y/o nariz al toser o estornudar (utilizando el codo flexionado o un pañuelo desechable).
– Practicar la higiene de manos de manera continua, sobre todo si nuestras manos han estado en contacto con secreciones respiratorias.
– Evitar compartir artículos de uso personal, como los utensilios para comer o beber.
– Mantener una adecuada ventilación en ambientes cerrados.
También, nos podemos proteger de las IVR siguiendo estas recomendaciones: evitando el consumo de cigarrillos, ya que el humo de cigarro disminuye las defensas naturales del aparato respiratorio; procurar el uso correcto del tapaboca o mascarilla, que debe cubrir la boca, nariz y mentón; protegernos del frío y abrigarnos adecuadamente sin caer en excesos, especialmente en el invierno; realizar alguna actividad física, ya que esta estimula nuestro sistema inmune. Y, una medida muy importante es evitar automedicarse, especialmente con antibióticos; pues el uso incorrecto de estos va a contribuir a la aparición de bacterias resistentes.
En algunas infecciones respiratorias podemos disminuir el riesgo de contagio mediante la vacunación; es el caso de la influenza o gripe y de la neumonía por pneumococo, la vacuna contra esta se recomienda, sobre todo, a las poblaciones de riesgo como los adultos mayores.
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.